ZEC y ZEPA Alto Tajo
Las Tetas de Viana gozan de una figura de protección específica para los cerros y su entorno más cercano: el Monumento Natural (figura perteneciente a los Espacios Naturales Protegidos [ENP]). Pero, a su vez, todo este espacio se engloba dentro de uno mucho mayor. Un territorio vertebrado por uno de los ríos más importantes de la península, el Tajo, el cual, junto con sus afluentes, ha ido transformando el terreno a lo largo de los siglos dando lugar a hoces y cañones fluviales con un enorme valor paisajístico y ambiental.
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Todos estos espacios se encuentran protegidos por otras figuras de protección pertenecientes a la Red Natura 2000: el Lugar de Interés Comunitario (LIC) Alto Tajo (que da lugar a la Zona de Especial Conservación (ZEC) Alto Tajo) y la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Alto Tajo. Figuras que tienen por misión la conservación de todos los elementos que conforman este territorio. Tanto los cursos de agua como la vida existente en sus inmediaciones: los bosques que han crecido en las laderas, la flora y la fauna que estos albergan, las aves que encuentran refugio en los roquedos... En definitiva, todo lo que da lugar a estos valiosísimos ecosistemas.
Lo cual no es poco, ya que en torno al 20% de las especies presentes en la flora ibérica se encuentran en el Alto Tajo. Pinares, quejigares, encinares y rebollares aparecen, bien en masas mixtas o bien como masas puras, sirviendo de hogar a todo tipo de especies animales. Pero, si bien las mencionadas masas destacan por su abundancia y predominancia, otras especies lo hacen por su aparición más reducida pero de excepcional valor, especialmente en las zonas más húmedas y frescas donde encontraremos bosquetes de avellanos, tejos, tilos, acebos y abedules, entre otras especies, como la Atropa baetica y el Delphinium fissum subsp. Sordidum, ambas en peligro de extinción.
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Un factor determinante para que este tipo de territorios tengan un gran valor natural es, lógicamente, la escasa intervención humana, lo que deja espacio a otras especies, como lo son el águila real, el halcón peregrino, el águila-azor perdicera, el topillo de Cabrera, la nutria, mariposas amenazadas como la Parnassius apallo y la Graellsia isabelae o el cangrejo de río autóctono, que tiene el Alto Tajo como uno de sus últimos reductos. Por lo que el cometido para nuestra especie (la especie humana), allá donde se extiendan los límites de éstas y otras figuras de protección, es procurar la supervivencia y el progreso de esas y otras especies que podrían verse amenazadas por nuestras acciones.
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Entre dichas acciones se encuentra el turismo de naturaleza, el cual, bien gestionado, no sólo no tiene por qué ser un inconveniente para los espacios naturales, sino que además puede convertirse en una herramienta de educación ambiental fundamental para fomentar el amor y el respeto por el medio ambiente. Algo que desde este blog se quiere reivindicar y que se hace posible gracias a los planes de gestión de los espacios naturales.
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Antes de cerrar este apartado del blog se quiere animar al lector a aprovechar la visita a las Tetas de Viana para conocer, al menos en parte, el territorio protegido por las figuras de protección aquí mencionadas. Además, si quieres profundizar sobre el Plan de Gestión del Alto Tajo, en el siguiente enlace podrás encontrar toda la información que desarrolla el breve resumen que acabas de leer:
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